Porque reciben a diario diferentes clases de desperdicios provenientes de inodoros, duchas, lavamanos, lavadoras, pisos e incluso grasas. Estos desperdicios son ricos principalmente en materia orgánica y grasas.
En los sistemas de drenaje y dentro de los pozos sépticos, habitan billones de bacterias que en condiciones óptimas pueden degradar esos compuestos, sin embargo, los problemas se presentan cuando se acumulan capas de grasas y lodos que no permiten que los procesos de descomposición ocurran de forma natural, causando arrastre hacia el campo de infiltración y, a su vez, produciendo el colapso del pozo séptico.
Sustancias como blanqueadores, desinfectantes de baños, detergentes, pasta para los dientes y jabones, también contribuyen a disminuir la población de bacterias y, por lo tanto, a alterar el ciclo de descomposición natural. Las señales que usualmente indican que el proceso de descomposición está fallando, son los malos olores, la excesiva acumulación de lodos, la necesidad de mantenimientos frecuentes y el bloqueo de las líneas de desagüe y de las zonas filtrantes.
El uso de BIOBUG SK-3 en pozos sépticos de viviendas, colegios, hoteles, restaurantes, casinos, campamentos y en general en todo sitio rural o urbano donde las aguas servidas tengan como destino un campo de infiltración, o una estación de bombeo o un tanque de almacenamiento, elimina muchos de estos problemas. La aplicación regular de BIOBUG SK-3 tiene grandes beneficios: reduce la acumulación de lodos (menor necesidad de extracciones), controla los olores, ayuda a mantener despejadas los pozos y áreas filtrantes y promueve la remoción de DBO y DQO. En general la mayoría de pozos tratados muestran una reducción importante en la acumulación de lodos que se traduce en un ahorro de dinero futuro, ya que se reducen o eliminan las extracciones mecánicas.